Es una tarta sencilla a la par que nos muestra una explosión de sabores en la boca. Un deleite para el paladar. Eso sí ... ¡Ojo! no es apta para menores, por el licor Kirsch (del alemán Kirsche – cereza) es un licor incoloro elaborado por destilación del jugo de una especie de cerezas silvestres producidas en la Selva Negra de Alemania. Es un licor de muy alta graduación alcohólica.
La tarta está preparada con bizcocho de vainilla, bañado con almíbar de kirsch, rellena de mermelada de cerezas al kirsch y cubierta con un glaseado de chocolate negro aromatizado con kirsch.
Como veis lleva el ingrediente por todos lados de ahí que no se apta para menores.
Si os decidís a probarla ya me contareis a que os recuerda, cuando la comáis.
A mí me hizo recordar mi viaje por Bélgica. Mentalmente me transporte a las calles de Bruselas con sus increíbles tiendas, en las que la vista no da crédito a la cantidad de variedades y formas en las que se muestra el chocolate como en la bombonería Neuhaus que se encuentra la famosa Galería de la reina.
Y como no, también a la ciudad de Brujas ( maravillosa, es un cuento hecho realidad) con sus callejuelas, sus canales, su arte y ¡¡su museo del chocolate!!
Y me recordó... a su cerveza de cerezas, que tuve el placer de saborear en la Muerte súbita. (Lugar de visita, obligado)
Pero en concreto me recordó a los bombones de licor y cerezas de Godiva. ¡¡Buenísimos!! Si tenéis ocasión de probarlos, entenderéis lo que intento describiros. Todos estos recuerdos, sentimientos, sabores y mucho más, están dentro de esta tarta.
El reto de este mes, para mí.. ha sido una mezcla de nuevos sabores, unidos a los recuerdos y sentimientos. Con mi ingrediente principal “con mucho cariño”
¡¡He disfrutado mucho elaborandolo!!
TARTA GOTAS VAINILLA KIRSCH
Ingredientes para el bizcocho:
4 huevos
200 g de mantequilla
250 g de harina.
Esencia de vainilla. ( Cantidad, al gusto de cada uno)
Una pizca de sal.
4 g de levadura química.
Elaboración:
Preparamos el molde de 18 cm, forramos o engrasamos.
Batimos mantequilla y azúcar hasta que blanquee y
aumente de tamaño.
Añadimos los huevos uno a uno y sin dejar de batir. Parecerá
que se corta pero no pasa nada se recuperara al seguir batiéndolo.
Añadimos la vainilla.
Añadimos la harina tamizada, la sal y la levadura.
Ponemos en el molde.
Horno precalentado 180º unos 30 m. pero ya sabéis
que tenéis que vigilarlo. Cada horno es un mundo y tendréis que cogerle el
punto.
Sacamos dejamos templar, desmoldamos dejamos enfriar por completo, envolvemos en
papel film y a la nevera hasta el día siguiente.
Podéis hacer el bizcocho en un solo molde y luego cortarlo, o bien repartir la mezcla
en dos iguales, ojo si es en dos moldes el tiempo de horneado será menor
Ingredientes y elaboración del almíbar:
Agua, azúcar y kirsch
Ponemos el agua a hervir junto con el azúcar. Cuando
este hecho nuestro almíbar le añadimos el licor y retiramos del fuego. Dejamos
templar antes de utilizarlo.
Para el relleno:
Este verano prepare mermelada de cereza, tenía guardado un frasco
en el congelador por lo que me vino a pedir de boca para poder utilizar parte
en el relleno, cosa que agradezco porque si no al final hubiera terminado comiéndome
sola el frasco a cucharadas.
Claro está,
que le añadí el licor y la verdad es que
queda deliciosa.
Si alguien quiere saber cómo lo hice que me deje un
mensaje en privado y estaré encantada de
contárselo.
Par la cobertura:
Chocolate negro, almíbar de kirsch y mantequilla.
Si alguien quiere saber cómo lo hice que me deje un
mensaje en privado y share encantada de contárselo.
El montaje, es muy sencillo:
Ponemos nuestros dos bizcochos, o si es uno cortamos
por la mitad, sobre una base.
Les añadimos el almíbar.
(Como
veis le puse sorpresa en esta ocasión, en el interior)
Cubrimos una parte con la mermelada al kirsch.
Ponemos la otra parte encima.
Glaseamos con el chocolate al Kirsch.
Dejamos enfriar.
¡¡ Y … a disfrutarlo!!
¡¡Si os gusta la receta no olvidéis dejarme un comentario, me
encanta leerlos y contestaros!!