Este pan tipo
brioche, con el suave sabor del plátano combinado con los trozos de chocolate,
es una delicia.
Excelente par
tomar en el desayuno o en la merienda, es fácil de preparar y aguante muy bien
durante varios días. Aunque no durará para comprobarlo.
Los cortes
que se le dan a la masa, le dan una bonita forma después del horneado a la vez
que es muy fácil de partir las tiernas y esponjosas porciones con la mano.
Qué más puedo
contar de este pan dulce, solo invitaros a prepararlo para que podáis disfrutar
de él.
Lo importante
es utilizar un buen plátano de canarias, el que tiene el mejor sabor del mundo.
En este paraíso isleño, puede madurar en la planta durante más tiempo, lo que
le una dulzura incomparable.
El plátano de
Canarias, que es de la variedad Cavendish del género de las musáceas es un
alimento con un elevado valor nutritivo, rico en fibra, alto valor energético y
su alto nivel de potasio.
La fruta
desaparece en la masa y si tú no dices que le pusiste, nadie lo apreciara en
textura, tan solo el dulce y delicado sabor de su masa a esta deliciosa fruta que
tantas cosas buenas nos aporta.
Pan dulce de Plátano
Ingredientes:
350 gr harina
40 gr azúcar
10 gr de levadura
fresca o 3 de levadura seca
1 plátano (100gr)
1 huevo L
95 gr de leche
50 gr de mantequilla
10 gr de leche en
polvo
Elaboración:
Pelamos y trituramos el plátano.
Pelamos y trituramos el plátano.
Poner todos los ingredientes
en el bol de la amasadora, menos la mantequilla.
Una vez integrado,
añadimos la mantequilla en trozos pequeños.
Dejar a velocidad
media, hasta que se integre, seguir hasta conseguir una masa fina y elástica.
Formar una bola y
dejar en un bol engrasado, hasta que doble su volumen.
Volcar sobre la mesa
y extender con las manos, formar un rectángulo (puedes ayudarte con el rodillo)
Poner el chocolate
por la superficie. Presionar suavemente, enrollar.
Si la masa está muy
blanda, dejar por unos 20 minutos en la nevera, para que la mantequilla coja
consistencia y sea más fácil de manejar.
Con la ayuda de una espátula
o cuchillo hacer cortes, de unos 2 cm. Sin descolocar, poner en un molde,
engrasado con mantequilla o forrado con papel vegetal.
Tapar y dejar que
doble el volumen.
Calentar el horno a
180º
Pintar con
mantequilla fundida, hornear por 17- 20 m hasta que este dorado.
Dejar enfriar antes de
desmoldar.