Magdalenas integrales con semillas

Cada día me preocupa más la alimentación.

Comer de manera sana es algo que tengo siempre muy en cuenta. Por eso me gusta preparar nuevas recetas.

Las magdalenas es un desayuno que gusta mucho en casa.

Las que más preparo son las clásicas, pero de vez en cuando me gusta probar y elaborar nuevas recetas.

Aprovechando algunos restos de harina integral de espelta y un  poco de mix de semillas que  me quedaba… prepare estas magdalenas.

 

Solo salieron 12 unidades, repartí la masa en estas preciosas capsulas de Cart Service. Como eran grandes se me quedaron un poco vacías por eso no llegaron al borde. Tampoco salió mucho copete. Aunque estaba previsto que sucediera y no me importo, estaba ansiosa por probar este nuevo invento.

No deje reposar la masa en la nevera, como suelo hacer. De ahí que quedaran más bajas. 

A la mitad le puse unas gotas de chocolate por encima, al resto le añadí semillas de pipas de girasol y de calabaza.

Una receta sencilla, como veis pero con ingredientes de primera.

Después de probarlas, creo que le habría ido muy bien un poco de ralladura de naranja o limón. (se me paso, ponerle) O una cucharada de esencia de vainilla.

Lo importante es que quedan esponjosa y muy jugosas, perfectas para el desayuno. Media mañana o la merienda.

Un bocado saludable y sano, que lo acompañamos con un té.  

Magdalenas integrales con semillas 

Ingredientes:

125 gr de huevo

175 gr de azúcar moreno

120 gr de leche desnatada (o vegetal)

60 gr de AOVE

210 gr de harina de espelta integral

8 gr de levadura química

70 gr de semillas variadas (pipas de girasol, pipas de calabaza, sésamo, lino, amapola, copos de avena…)

Una pizca de sal 

Elaboración:

Batir los huevos con el azúcar, hasta triplicar el volumen y formar una crema.

Añadir la leche poco apoco y sin dejar de batir.

Añadir el aceite sin dejar de batir.

Mezclar la harina con la levadura, la sal y las semillas.

Añadir a los líquidos la harina y batir suavemente hasta incorporar todos los ingredientes.

Tapar y dejar en la nevera por dos horas mínimo.

Puedes prepararlo el día anterior y dejar en la nevera hasta el día siguiente.

Precalentar el horno a máxima potencia (yo a 250º)

Sacar la masa de la nevera y batir un poco.

Preparar la bandeja con las capsulas. Rellenar hasta una tercera parte con la masa.

Poner unas semillas o gotas de chocolate, por encima.

Bajar la temperatura a 210º y hornear por unos 12 a 14 minutos dependerá del horno.

Sacar y dejar enfriar, sobre una rejilla.