Una vez más os
traigo una receta de aprovechamiento.
Cuando estoy a un
par de días de salir de viaje, lo que hago es intentar consumir todo lo que
quede en la nevera. La verdad es que me encanta hacer esto, como bien sabéis
los que leéis mis publicaciones, es algo que hago, en muchas ocasiones.
Esta vez me encontré
con unos paquetes de masa para empanadas, así que uno lo utilice para salado y
el otro para dulce.
Prepare unas recetas
sencillas y rápidas, que suelen ser de las que más gustan, si se eligen bien
los ingredientes.
Para la dulce lo
tuve muy fácil porque hacía unos días, que había preparado una crema casera de
cacao y avellanas. Mi hija me la pidió para acompañar unos gofres con fruta.
Como no tenia en
casa las típicas cremas que compramos. No lo dude ni un momento, tenía lo
necesario apenas tres ingredientes avellanas, chocolate y aceite y un poco de
azúcar. Si ya sé que esteréis pensando que no son tres, es cierto en realidad
son cuatro pero son ingredientes que se tienen en la despensa de casa
habitualmente. Era la primera vez que preparaba esta crema en casa. Me sorprendió
mucho el resultado. Está muy buena.
A demás tiene la
ventaja que la puedes preparar a gusto de sabor y dulzor. Para mí las que compramos
son muy dulces y empalagosas. Pero, para gustos los colores.
En fin, que esta
receta lo podéis preparar tanto con crema casera, como con la que utilicéis normalmente
en casa. Os quedara un dulce muy rico para tomar en la merienda o en el
desayuno, acompañado de un té o un café.
Con muy poca cosa,
podemos tener un dulce muy atractivo y apetitoso.
Ingredientes:
Crema de cacao y
avellanas:
150 gr de avellanas
100 gr de chocolate
con leche
50 gr de chocolate
negro
2 cucharadas de azúcar
glas avainillado
1 cucharada de
aceite de girasol.
1 Lamina de masa
para empanada
1 huevo para pintar
la masa.
Elaboración:
Crema de cacao:
En una picadora o
procesadora de alimentos, trituramos las avellanas hasta conseguir una crema.
Deshacemos el
chocolate en el microondas a intervalos de tiempo cortos, para que no se queme.
Le añadimos el
chocolate a la procesadora, a la crema de avellanas. Mezclamos bien.
Por ultimo le
ponemos una cucharada de aceite de girasol. Mezclamos bien. Envasamos, dejamos
enfriar y tendremos una estupenda crema.
Podemos guardarla en
la nevera, solo tendremos que sacarla unos minutos antes de utilizarla para que
sea más manejable.
Extendemos la lámina
de masa.
La dividimos en dos
partes, una de ellas, un poco más grande. Es la que vamos a rellenar.
Con la otra parte
hacemos tiras finas.
Colocamos un papel sobre
la parte, del relleno y vamos formando nuestro enrejado con las tiras. Lo llevamos
al congelador por unos minutos.
Rellenamos el centro
de la masa con la crema de chocolate y extendemos, sin llegar a los bordes.
Sacamos del
congelador nuestras tiras, que habrán endurecido y serán más fáciles de manejar
para evitar que se manchen con el chocolate.
Retiramos el papel,
cerramos los bordes hacia dentro. Adornamos con el resto de la masa. Y unas
avellanas enteras.
En este caso corte
unas hojas y unas pequeñas flores con ayuda de unos cortadores.
Pintamos con huevo
batido, con cuidado. Le ponemos unas avellanas.
Horno precalentado 220 grados. Hasta que este dorado unos
12 a 15 m. Pero esto dependerá de cada horno. Cuando la masa este cocida y
dorada. Sacamos, dejamos enfriar.