En esta ocasión decidí probar con frutas tropicales para darle un aspecto y sabor totalmente diferente a lo tradicional, (piña, mango, coco y un fruto seco la avellana, que le aporta mucho sabor al pastel) No le puse mucha cantidad pero la masa admite más sin problema. Aunque como era la primera vez que lo preparaba no quise arriesgarme.
Pensé en poner pasas pero después no las añadí porque el sabor de la masa con estas frutas me pareció muy bueno, y las pasas lo hubieran cambiado.
He de deciros que la inspiración me vino cuando el Chef Enrique publico la receta del Cake de frutas confitadas, también conocido como budín ingles pero como en casa no les gustan las frutas confitadas, transforme un poco la receta pero que las cantidades básicas y los principales ingredientes son tal cual los publica en su página. La receta es de Alain Ducasse. Espero que una vez más me disculpen por los cambios.
Lo que hice fue hidratar las frutas y el coco laminado en vino dulce durante un día. La verdad es que quedaron muy buenas.
A mí me ha gustado mucho el resultado no tiene nada que ver con los bizcochos de frutas confitadas el sabor es totalmente diferente, queda una masa compacta pero muy jugosa, que permite cortar finas lonchas sin que se rompan, pero nada seca con un aroma intenso y el sabor a las frutas tropicales, junto con las avellanas, es una verdadera delicia.
Seguiré preparándolo con otros tipos de frutas, ya tengo nuevas ideas en mi cabeza dando vueltas.
Bundt Cake de Frutas Tropicales
Ingredientes:
125 g de mantequilla a temperatura ambiente
125 g de azúcar
4 huevos L
270 g de harina común
8 g d levadura química
Ralladura de un limón
100 gr de piña deshidratada.
100 g de papaya deshidratada.
25 g de coco laminado y deshidratado.
1 Taza de avellanas picadas.
Vino dulce.
Almíbar para hidratar:
100 g de agua
50 g de azúcar
25 ml de vino dulce
Elaboración:
Ponemos en un cazo el azúcar el agua, cuando este disuelto el
azúcar, añadimos el vino dulce y retiramos del fuego. Dejamos enfriar y
reservamos.
Colocamos las frutas deshidratadas en cuencos y las cubrimos
con vino dulce. Las dejaremos macerar un día mínimo.
Batimos la mantequilla junto con el azúcar, hasta que esté todo bien integrado y nos quede una crema.
Tamizamos la harina junto con la levadura.
Añadimos la ralladura de limón a la mantequilla.
Incorporamos los huevos uno a uno alternando con los ingredientes secos (harina y levadura)
Añadimos un huevo, dejamos que se incorpore y le añadimos una parte de harina, cuando esté integrada le añadimos el segundo huevo dejamos que se integre y ponemos otra parte de harina, así hasta que acabemos con los ingredientes.
Cuando este todo mezclado. Pasmos las frutas bien escurridas por harina y las incorporamos, mezclamos.
Añadimos las avellanas picadas y mezclamos.
Engrasamos el molde y enharinamos.
Ponemos la masa en el molde, tapamos con papel film, y guardamos en la nevera como mínimo 6 horas, o dejamos hasta el día siguiente.
Horno precalentado a
200º, durante 10 minutos, después bajamos a 160º otros 45 minutos.
Comprobamos que este bien cocido, sacamos y en caliente le ponemos el almíbar. (Agua, azúcar y vino dulce)
Desmoldamos y dejamos enfriar y reposar.
Adornamos a nuestro gusto y...
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¡¡Hasta pronto!!