Me encanta elaborar recetas propias, esta es una de
ellas. Y esta tan buena, que sería un gran error no compartirla. Y Privaros de disfrutar de este bundt, sería muy
egoísta por mi parte. Cosa que no soy. Sino todo lo contrario.
Las recetas buenas, son como las buenas canciones
tienen que compartirse, porque están llenas de momentos y sentimientos únicos e
irrepetibles.
Cada receta, que preparo es por alguna razón, y para algún
momento.
Este fue para un desayuno de domingo. Me despertó el ruido de una granizada,
soplaba el viento.
No soy de perder el tiempo. Y aun así, me faltan horas,
para hacer todo lo que me gustaría, en un día.
Me levante muy pronto, me prepare un café, y encendí el
horno, así… sin más.
Decidí preparar un desayuno un poco especial, de
domingo. Me refiero a un desayuno sin prisas, sin horarios. (En mi casa siempre
hay bollería casera o pan casero para los desayunos)
Entonces como un autómata, empecé a poner ingredientes
en la mesa. Elegí y descarte algunos. Tenía
que ser algo sencillo pero delicioso.
Me gusta disfrutar de cada preparación culinaria, a solas, mi imaginación vuela
y pierdo el sentido del tiempo. Mezclo, pruebo la masa, le añado o quito algo,
voy apuntando en una libreta, rectificando medidas. Así, poco apoco sin prisas, es como
surgen las nuevas recetas. Momentos llenos de sentimientos. Míos solo míos y de
nadie más.
Este es un bizcocho
muy esponjoso y muy aromático. Desprende un aroma al hornearlo, que es una delicia.
La nata junto con la lima, le dan un sabor único
que no es fácil de describir. La miel le aporta humedad y jugosidad. La union de todos estos ingredientes, nos da un bizcocho
perfecto para desayunos y meriendas.
¡¡Está buenísimo!!
Se deja comer solo.
En casa duro,
muy poco, lo cual me alegra. Porque no hubiera podido resistirme a él, cada vez
que mi mirada lo encontrara.Seria una tentacion, irresistible.
Es muy ligero y esponjoso,
a pesar de que la masa es espesa y densa, la magia del horno lo
transforma en un bocado único y delicioso.
La cobertura de
chocolate, junto con la lima le aporta dulzor y un toque refrescante a la vez.
Creo que es de los
mejores bizcochos que he probado hasta ahora, con cítricos. La lima le aporta
ese toque tan especial.
¡¡A mí, me encanta!!
Bundt cake de nata y lima
Ingredientes:
230 ml de nata para
montar.
175 gr de azúcar
3 huevos a
temperatura ambiente
1 cucharada sopera
de miel de flores
220 gr de harina
8 gr de levadura
El zumo de 1 lima y
su piel rallada
Para cubrir:
100 gr de chocolate
blanco
50 gr de leche
entera o nata.
1 hoja de gelatina
Ralladura de lima.
Elaboración:
Batimos los huevos
junto con el azúcar, hasta triplicar su tamaño y formar una crema.
Le añadimos la nata
semi-montada, mezclamos.
Le incorporamos el
zumo y la ralladura, mezclamos.
Le añadimos la miel,
mezclamos.
Tamizamos la harina
junto con la levadura se le añadimos, mezclamos solo hasta integrar.
Engrasamos el molde
con mantequilla derretida y le ponemos harina con la ayuda de un colador. Retiramos
el exceso de la harina.
Vertemos la masa en
el molde, (queda bastante densa) repartimos uniformemente.
Horno precalentado a
180 grados por 40 m.
Comprobamos que este
bien cocido pinchando con una brocheta de madera.
Sacamos y dejamos
por unos diez minutos en el molde.
Retiramos del molde
y dejamos que se enfrié por completo.
Mientras preparamos nuestra
cobertura de chocolate.
Ponemos la hoja de
gelatina a hidratar en agua fría por unos minutos.
Calentamos la leche
en el microondas.
Le añadimos el
chocolate troceado, y movenos hasta que se derrita y forme una crema.
Le añadimos la
gelatina bien escurrida, y mezclamos hasta que se disuelva en el chocolate.
Dejamos que pierda temperatura, podemos meterlo por unos minutos en el frigorífico
para que tarde menos.
Mezclamos muy bien
ponemos por encima de nuestro bizcocho. Y por último le ponemos ralladura de
lima, que le aportara frescor y un toque de sabor al chocolate.
Dejamos enfriar por completo el chocolate.
Podéis seguirme en:
¡¡Hasta pronto!!
