Bundt cake de mascarpone, mandarinas y oreos.

¡¡Hola!!
Con esta receta finalizo mes, así que había que despedirse de noviembre de una manera especial. 

Este bizcocho es delicioso. Ayer fue uno de esos días en que me siento inspirada, me da por inventar y experimentar con ingredientes.
Con el resultado de esta receta estoy muy satisfecha. Si hoy está bueno, mañana cuando repose va a ser un escándalo, espero que no se termine y dure para el desayuno.
Como ya sabéis, suelo aprovechar los ingredientes de los que dispongo en la nevera, para preparar nuevas recetas.
Mire y vi que tenía varias tarrinas de mascarpone, así que ya tenía el primer ingrediente.
Como me he pasado todo el fin de semana con un buen resfriado, la vitamina C era importante así que escogí mandarinas, entre la fruta que tenía.
Y colocando la alacena encontré un paquete empezado de oreo, decidí acabarlo.
Así a lo tonto ya tenía tres ingredientes para utilizar. Cogí  mi cuaderno y empecé a calcular proporciones para elaborar la receta.  Salió este estupendo pastel.

Queda súper jugoso y húmedo, y encontrar los tropezones de las galletas entre el bizcocho de intenso sabor a mandarina os aseguro que es una delicia.

El glaseado que le puse a base de zumo y azúcar, le aporta un toque muy curioso, no quise cubrir todo. No quería que quedara muy empalagoso ni excederme en el sabor de la mandarina, tampoco quería cubrir  el dibujo tan bonito que tiene este molde. Lo compre en Portugal, la pasada Semana Santa. Me gusta mucho es muy util, sirve para bizcocho, flanes, pudin... Yo lo utilizo para cualquier cosa. No pensé que me iba a dar tanto juego.  

Bueno yo creo que lo mejor es que vallamos al grano y empecemos con la receta.

Bundt cake de mascarpone, mandarinas y oreos.

Ingredientes:

100 g de harina

100 g de mascarpone
90 g de azúcar moreno
2 huevos
8 g  de levadura química
60 g de zumo de mandarina
Ralladura de mandarina o de naranja.
30 g de aceite de oliva (AOVE)
Una cucharada de miel de flores.
Medio paquete pequeño de galletas oreo
Azúcar glas para decorar. 
Unas gotas de zumo para el glaseado de mandarina.

Elaboración:

Batimos los huevos con el azúcar moreno hasta que blanqueen y tripliquen su volumen.

Mezclamos el zumo y el aceite con el mascarpone hasta conseguir una crema, le añadimos la ralladura.

Añadimos la crema del queso a los huevos sin dejar de batir (Velocidad lenta) para que se integre.
Tamizamos la harina con la levadura, la incorporamos a la mezcla, con movimientos suaves y envolventes con una espátula.
Por ultimo las galletas troceadas, mezclamos apenas con un par de movimientos para que los trozos no se vayan al fondo.
Engrasamos y enharinamos el molde, vertemos la mezcla en él.

Mientras el horno se calienta a180º lo dejamos en la nevera.
Una vez el horno caliente, en 25 m estará listo. Pero no olvidéis comprobarlo antes de sacarlo.
 Desmoldamos a los pocos minutos y dejamos enfriar.

Con el azúcar glas y unas cucharadas de zumo de mandarina hacemos un glaseado para decorar y acentuarle el sabor.