viernes, 13 de noviembre de 2020

Panecillos de aove (rápidos)

 

Vuelves a casa después del trabajo y te das cuenta que no queda pan, y no te apetece salir a comprar.   




No sé
 a ti, pero a mí... me da mucho coraje y pereza volver a salir.

No te agobies, que vamos a ponerle solución. 

 

Preparamos unos pequeños panecillos que me solucionan la cena y el desayuno del día siguiente, en unas dos o tres horas.

 

Busca en la despensa…Un poco de harina, agua, sal, levadura y un buen aove, será mas que suficiente.

Le puedes añadir unos gr de MM, pero no es necesario. en esta ocasión se lo puse porque tenia preparada en ese momento. Pero no hace falta, puedes prescindir de ella y omitir este ingrediente.

 

Pongo en marcha mi amasadora, le coloco los ingredientes en el bol y la dejo trabajar mientras yo voy preparando otras cosas para la cena. Hoy en concreto solomillo ibérico, lo pongo a macerar con ajo, perejil, sal, pimienta y aove. Dejo en la nevera hasta el momento de cocinarlo.

 

Preparo un bol con ensalada  y el aliño aparate, reservo en la nevera y en nada tengo una estupenda cena preparada.

 




            Panecillos de aove (rápidos)

 

Ingredientes:


400 gr de harina de fuerza o panadera.

225 gr de agua

10 gr de sal

5 gr de levadura fresca

35 gr de aove

15 gr de MM (opcional, no hace falta ponerlo)

 

Elaboración:


Coloco todos los ingredientes en el bol de la amasadora, empiezo con la pala para que se integre todo rápido.

Cambio al gancho y dejo que se amase por unos 10 m.

Saco la masa le doy forma de bola y la pongo en un bol engrasado por unos 30 a 40 m.


Estiramos la masa la doy un pliegue sencillo y cortamos porciones del mismo peso.


Formamos una bola con cada porción.(Para hacer panecillos redondos)


Colocamos en la bandeja de horno sobre papel vegetal.


Tapar con un paño húmedo y dejar levar, hasta duplicar el volumen. (Para acelerarlo podemos colocar la bandeja en el horno precalentado a 60º, apagamos y en unos 20m estaban listos) 



Pintamos con agua cada panecillo y hacemos un corte central profundo en cada uno.


Horno precalentado a 250º, con un recipiente con agua.


Bajar la temperatura a 200º y hornear por unos 30 m o hasta que estén cocidos y dorados.


Dejar enfriar en una rejilla.




lunes, 9 de noviembre de 2020

Galletas Danesas




Una curiosa lata azul que se conoce en todo el mundo.                           

 "El mundo unido por una caja de galletas”


Estas famosas galletas danesas o galletas de mantequilla, comercializadas en un lata azul, que después se utiliza en miles de hogares como almacenamiento, para costura.


¿Quien no ha guardado hilos y agujas en esta bonita lata? o usado para guardar galletas caseras…


Una galleta sencilla, delicioso bocado para desayunos meriendas, hora del te.


cómo no, encontrarlas también en fechas señaladas, celebraciones, navidad, comidas familiares… era muy común hace ya algunos años atrás.


Quien no ha encontrado una lata en un armario y la ha abierto con la esperanza de encontrar galletas y se encontró con un kit de costura, y no creáis que es aquí en España donde utilizamos la lata para guardar hilos, se hace en muchas partes del mundo. Incluso en Dinamarca utilizan la lata como kit de almacenaje.


En esta lata, por si no lo recuerdas, existen cinco clases distintas de galletas1. Con forma redonda. 2.Forma de lazo. 3.Rectangular. 4.De coco. 5.La redonda.


Esta es mi receta y mi manera de elaborarlas durante años en mi familia.


Hay muchas rectas yo he adaptado a mi gusto la original que solo lleva tres ingredientes. dandole mi toque personal.





                 Galletas Danesas


Ingredientes:


200 gr de mantequilla (temperatura ambiente)

100 gr de azúcar glas

1 huevo L

300 gr de harina

1 cucharada de esencia de vainilla

5 gr de sal

 

Elaboración:


Batir la mantequilla junto con el azúcar glas y la mantequilla, hasta que aumente el volumen y la mezcla blanquee.


Añadir la esencia de vainilla y el huevo, seguir batiendo hasta que se integre el huevo.


Añadir la harina tamizada poco apoco, a velocidad lenta o con la espátula.


Poner la masa en una manga pastelera con boquilla rizada grande.


Formar las galletas sobre la bandeja de horno con papel de horno.


Llevar a la nevera por 20 m para que endurezcan y no pierdan las forma.


Horno 170º por 12 a 15 m, hasta que los bordes empiecen adorarse.


Sacar y dejar templar en la bandeja, después terminar de enfriar sobre una boquilla.





martes, 3 de noviembre de 2020

Hokkaido (Pan de leche Japonés)

 



Este delicioso pan de origen japonés se come en rebanadas, o en pequeños bollos que pueden rellenarse con dulce o salado. De textura suave, esponjosa.

Tiene una bonita historia  detrás como todos los panes, que forman parte de la historia y la evolución de cada país.

En Japón la harina de trigo no se conocía,  fue con la llegada de los primeros misioneros portugueses en el siglo XVII. Cuando el cereal fue dado aconocer. Aunque en un principio, su consumo era menor que  el de la harina de arroz, más barata y fácil de obtener. 

El arroz no dejaba mucho sitio, a un cereal que apenas se cultivaba. Cuando acabó la Segunda Guerra Mundial la producción de arroz de Japón estaba en sus mínimos... uno de los acuerdos de la rendición de Japón, fue que el gobierno japonés estaba obligado a comprar los excedentes de trigo de los Estados Unidos. Teniendo en cuenta la escasez de alimentos de ese momento, el pan pasó a ser un recurso barato, se extendió el consumo de este cereal. Hoy en día el pan convive con el arroz. Curiosamente, los resultados de una encuesta realizada por el ministerio de asuntos internos de Japón en el año 2011 revelaron, que por primera vez el gasto familiar en pan fue mayor que el gasto en arroz.

El pan más común en Japón es el Shokupan,  el primo azucarado del mismo es el Pan de Hokkaido.

Este pan también se encuentra en otros países asiáticos bajo la denominación de pan con Tang Zhong.

Tang Zhong. Es uno de los ingredientes del ‘Pan de Hokkaido’; de hecho es una técnica que consiste en una mezcla agua y harina (1 parte de harina y 5 partes de agua) que se cocina a fuego lento hasta alcanzar los 65 º y que cuando se enfría se añade a la receta del pan. El Tang Zhong o ‘water roux’(Técnica Francesa) permite que la masa absorba mayor cantidad de líquido debido a la gelatinización del almidón, lo que produce un pan mucho más esponjoso, una corteza suave, una miga elástica que hace que el pan se conserve fresco por más tiempo. 

 

                              Hokkaido (Pan de leche Japonés)

 

Ingredientes:

Tang Zhong:

200 gr de agua

40 gr de harina

Masa:

450 gr de harina de fuerza

200 gr de leche

60 gr de mantequilla

1 huevo L

10 gr de sal

15 gr de levadura fresca

1 cucharada sopera de miel

Todo el Tang Zhong

 

Elaboración:

En un cazo a fuego medio ponemos el agua junto con la harina, removemos con lasbarillas, hasta conseguir una crema ligera y sutil, sin grumos. A modo de bechamel. (Esta técnica es igual que la elaboración del rus francés)

Dejamos enfriar, cubrimos con film y dejamos en la nevera toda la noche.

 

Para elaborar la masa:

Sacaremos el tang zhong de la nevera, el huevo y la mantequilla. Dejaremos atemperar,

Ponemos en el bol de la amasadora todos los ingredientes, menos la mantequilla.

Una vez los ingredientes estén integrados, añadimos la mantequilla y dejaremos amasar hasta conseguir una masa tersa fina y elástica, con el gluten bien desarrollado.

Formaremos una bola y dejaremos en un bol engrasado hasta que triplique su volumen

Des gasificamos la masa y dividimos en porciones.

Hacemos bola con cada porción y dejamos reposar por unos 20 m para que la masa se relaje.

Aunque la masa es pegajosa, no hay que añadir nada de harina.

Estiramos cada bola en forma rectangular con las manos, doblamos en tres a modo de tríptico y enrollamos.

Colocamos en un recipiente o molde apto para el horno. Dejamos fermentar y levar por tres veces su volumen.

Horno precalentado a 180º por unos 20 a 30 m. Dependiendo del tamaño de cada pan.

Antes de meter al horno pintamos la superficie con clara de huevo o mantequilla fundida, con cuidado de no aplastarlo.

Dejamos templar en el molde. Después pasamos a una rejilla para que termine de enfriar.

Este pan está mucho mejor y se corta con más facilidad al día siguiente, La masa estará más asentada y estable.

Se conserva por una semana o más en perfecto estado, manteniendo su esponjosidad. Siempre que se guarde cubierto con film, en una campana o en un recipiente hermético.