Me encanta esta variedad de melón. Son melones pequeños, de forma esférica, con piel rugosa y pulpa anaranjada con un gran aroma.
Muy bajo en calorías,
rico en nutrientes como la vitaminas A y C, ácido fólico y potasio.
Tiene un sabor
muy dulce y particular, acompañado de un precioso color naranja, y el tamaño le
hace ser ideal para una buena presentación. Utilizando su piel, como recipiente
para servir en la mesa.
A mí me gusta,
utilizarlos a modo de cuenco para servir una crema fría en un entrante, o para
presentar el postre relleno de bolitas de frutas variadas acompañado de crema o helado de yogur
casero
Es ideal para postre o desayunos veraniegos de domingo.
Es ideal para postre o desayunos veraniegos de domingo.
Esta vez, he preparado un helado para servir junto a la
fruta. Un postre veraniego y refrescante. O para tomarlo a
modo de sorbete a media tarde. Es un helado que puede servirnos para varias
recetas y presentaciones, además es sano y nutritivo.
Una receta muy
fácil y rápida de preparar. Sin ninguna complicación, se puede preparar sin
heladera, aunque yo la he utilizado en esta elaboración.
Lo prepare
para el postre del domingo, para ello he utilizado unos de los
cuatro melones, que compre.
El melón pesaba
1.3 kg lo partí por la mitad y conserve
la piel exterior, para después utilizarlo. Como no quería que se estropeara, lo congele.
Y también guarde
la parte de las semillas en la nevera, no las tire como es lo habitual. Quiero utilizarlas.
Helado de melón Cantalupo
Ingredientes:
1 Kg de melón Cantalupo limpio
500 gr de nata
para montar.
90 gr de azúcar
Elaboración:
Troceamos el melón
y le añadimos el azúcar en grano y el invertido,
(podéis prepararlo y conservarlo para preparar otras recetas). O bien sustituirlo
por Golden syrup.
Trituramos todo
bien hasta conseguir una crema. Reservamos en el frigorífico.
Montamos la nata,
con las varillas hasta conseguir una crema densa, no montada del todo, entre
semi montada y muy montada.
La mezclamos con
la crema de melón.
Si no vamos a
utilizar la heladera, la vertemos en un recipiente, tapamos con film transparente
pegado a la superficie. La dejamos en el congelador por 40 m. Sacamos y volvemos
a mezclar bien con las varillas o con un tenedor, para evitar que cristalice.
(Elazúcar invertido,
es un ingrediente que ayuda a que esto no suceda)
Volvemos a
dejarlo en el congelador por 25 m, sacamos repetimos la operación, batiendo para
romper los cristales.
Llevamos al
congelador y repetimos un par de veces más el mismo proceso. Cuantas más veces repitamos este proceso más
cremoso quedara.
Después, lo
dejamos en el congelador por al menos 4 horas o hasta el momento de utilizarlo.
Es conveniente sacarlo 20 m antes de servir, para que sea más fácil manipularlo.
Si lo vais a preparar
en heladera, como fue mi caso, dejamos la crema por un par de horas en la
nevera para que este bien fría.
Ponemos la heladera
en marcha y le vamos incorporando la crema poco apoco, dejamos que la maquina
haga su trabajo… en 20 a 30 m aproximadamente, estará a punto para guardarlo en
un recipiente en el congelador.
O bien servirlo
así, directamente a modo de sorbete en
copas acompañado de frutos secos, chocolate salsa de caramelo. Como más os
guste.