Es muy fácil de preparar en apenas unos minutos lo tendremos listo. Incluso sin heladera queda estupendo y cremoso.
Muy refrescante a la vez que muy atractivo al encontrar los pequeños trozos de galleta que le van que ni pintado a esta mezcla. Toda una delicia para esas noches de verano. Imaginaros tumbados en una hamaca en el jardín. Bajo un manto de estrellas saboreando cucharada a cucharada. Con el sonido de los grillos a lo lejos... ¡¡¡Bueno vale, ya me callo!!!
Si es que soñar es gratis y la vida sin sueños, no es nada.
No me hagáis caso, lo tomáis donde queráis y con quien queráis.
Helado
de mascarpone, yogur, chocolate blanco y oreos
Ingredientes:
4 yogures griegos (En esta ocasión los puse de coco)
1 tableta de chocolate blanco
50 g de azúcar glas
2 cucharadas soperas de azúcar invertido (receta aquí)
Un paquete pequeño de galletas oreo.
Elaboración:
Derretimos el chocolate y dejamos templar.
En un recipiente ponemos el queso mascarpone y el azúcar glas y mezclamos con las varillas.
A esta mezcla, le añadimos los yogures y el azúcar invertido, mezclamos bien.
Le incorporamos el chocolate blanco derretido y mezclamos hasta conseguir que este todo integrado.
Levamos a la nevera unas horas para que este bien frio.
Ponemos la heladera en marcha y le vamos echando nuestra mezcla poco a poco.
Dejamos por unos 20 m aproximadamente.
Mientras, machacamos nuestras galletas.
Cuando el helado este hecho le ponemos las galletas troceadas y dejamos por un par de minutos más en la heladera hasta que se integre bien a la mezcla.
Colocamos en un recipiente tapamos y llevamos al congelador.
Sacamos unos 15 m antes de consumir para que sea más fácil manipularlo.
En el caso de no tener heladera, añadimos las galletas a la mezcla. Ponemos en un recipiente, llevamos al congelador, sacamos cada dos horas y mezclándolo, por dos veces. También quedara estupendo y muy cremoso.