domingo, 8 de octubre de 2017

Pollo crujiente con salsa de lima




El pollo es un ave gallinácea de carne blanca, alimento básico presente en la cocina de todo el mundo y además muy saludable. Es baja en grasa y en calorías y con altos niveles de proteínas, vitaminas, minerales y carbohidratos.

Favorece al desarrollo muscular, fortalece los huesos y las defensas. Es un antidepresivo natural. Aumenta la capacidad cerebral. Cuida de nuestros ojos y de nuestra piel gracias a su contenido en vitamina A y C…
Como veis lo tiene prácticamente todo, por eso es de las carnes más consumidas en todo el mundo.

Se puede cocinar entero. Pero también es muy utilizado en despiece.
Pechugas, alitas, muslos, contra muslos. Todas sus partes podemos elaborarlas de muchas maneras.  

Hoy os traigo una receta fácil y muy rica que gusta a todos.  Yo la suelo preparar con pechuga pero podríamos prepararlo también, con filetes de contra muslos.
Nosotros preferimos la pechuga, pero eso ya lo dejo a vuestro gusto y elección.

A mi me gusta partirla en casa pero podéis pedir que os la preparen en vuestra tienda habitual.

En casa somos amantes de los cítricos, en especial mi hija, todo lo tomaría con limón o lima.

Cuando encuentro unas buenas limas en el mercado, hago un buen acopio de ellas, se conservan muy bien en el frigorífico por más de una semana. Las utilizo tanto en recetas saladas como en la repostería y dulces. Bueno algún mojito que otro de vez en cuando… también jejeje.

Pero la bebida que más me gusta es en limonada. Suelo prepararme una jarra de agua mineral, con trozos de lima, frambuesas o las frutas que tenga. La dejo en la nevera y voy tomándola a lo largo del día. 

Como veis podéis utilizarlo en muchas recetas de todo tipo, la lima al pollo le va a las mil maravillas, al no ser tan acido como los limones, le da un toque más refrescante muy peculiar.

Otro de mis imprescindibles en la cocina (para el alineo de carne y pescado),  además de del ajo y el perejil, ha sido mi descubrimiento del jengibre fresco. Comencé utilizándolo  en la repostería en bizcochos y galletas y ahora suelo ponerlo en muchas de mis recetas saladas, además del aporte de sabor tiene numerosas propiedades que son beneficiosas para la salud.




Esta receta la tomamos en casa desde hace mucho tiempo, alguna vez que otra. le cambio el rebozado y el marinado. Pero eso os lo contare en  otra publicación próximamente. Hoy nos centramos en esta.



Después de todo lo que os he contado, no me digáis que no os apetece probar esta receta que además de fácil, lo tiene todo para cuidar nuestra alimentación y comer sano y saludable.



¡¡Vamos con la receta!!





Pollo crujiente con salsa de lima

Ingredientes: 4 personas

800 gr de pechuga de pollo
Jengibre fresco rallado
Sal
Pimienta
1 huevo L
 1 diente de ajo picado y perejil
Ralladura de lima
Harina de maíz refinada o pan rallado
Aceite de oliva

Para la salsa:
200 ml de agua
5 gr de sal
1 cucharadita de azúcar moreno
1 cuchara sopera de miel de flores
El zumo de una lima 
Cucharadita de harina de maíz

Elaboración:
Cortamos las pechugas en tiras finas o filetitos finos.
Salpimentamos y ponemos en un bol.
Le añadimos el diente de ajo picado, el perejil, la ralladura de jengibre, la de la lima y el huevo.
Mezclamos todo bien y dejamos marinar por 30 m mínimo.
Pasamos las tiras o filetitos del pollo por harina de maíz o pan rallado. Freímos en abundante aceite, hasta que estén dorados.
Sacamos y dejamos sobre papel adsorbente para eliminar el exceso de grasa.

Para elaborar la salsa: mezclamos todos los ingredientes.
Ponemos en un cazo al fuego medio, removiendo constantemente para evitar que hierva. Cuando espese la salsa estará lista para servir.
Podemos acompañar el pollo con unas patatas fritas, con verdura, con un poco de arroz...

Y tendremos un plato único muy completo.
Podemos servirlo empatado con la salsa o bien, en una fuente y la salsa en un bol para que cada comensal se sirva su gusto.



sábado, 30 de septiembre de 2017

Irish Apple Cake (Pastel de manzanas Irlandés)




Tenía esta receta en pendientes hace mucho tiempo, y por unas cosas u otras no veía el momento de prepararlo.
Fue uno de estos días, en los que había comprado unas estupendas manzanas, pensé que utilizaría parte de ellas para elaborar un dulce, pensé en una tarta de manzana, pero me gusta probar nuevas recetas y me acorde de esta receta que aparte de rica tiene un precioso nombre.
Esta deliciosa tarta, bizcocho, pastel… Es una receta Irlandesa típica del condado de Kerry, ( conocida tambien como Irish Kerry cake) está elaborada con manzana y es muy diferente a un bizcocho tradicional. Su textura esta entre el bizcocho y el pan. 

Se suele preparar para el día de san patricio (St.Patrick's Day), aunque no hay casa en la que no se elabore este pastel en multitud de ocasiones.
Me encanto, y a pesar de que había leído que era un bizcocho más bien seco, y que lo tradicional era acompañarlo de crema inglesa templada. Mi caso no fue así.
Me quedo una textura consistente, pero nada seca, todo lo contrario húmeda y muy jugosa, aunque si se desmiga con facilidad, cosa que veo lógica, por llevar mucha manzana y por la elaboración.
Yo creo  que la pequeña variación que hice, le aporto mucha jugosidad.  Solo fue una pequeña os lo aseguro, el resto lo hice tal cual la receta autentica. Fue lo siguiente: pele y trocee las manzanas (variadas) y para evitar que se oxidaran las puse un poco de azúcar y el zumo de medio limón. Las tape y las deje macerar mientras preparaba la masa, que apenas fueron diez minutos pero… creo que ese puede ser el motivo de aportar más humedad y jugosidad.
Otro cambio que hice fue una de las especias el clavo lo sustituí por canela, porque no tenía. Aunque la próxima vez lo pondré.
El sabor que le dan las especias es uno de los toques especiales de este pastel y deciros que le van ala mil maravillas.
La textura es increíblemente buena, mejor dicho buenísima. Y el encontrarte los trozos de manzana en abundancia es una verdadera delicia.

Le puse azúcar moreno en vez de blanco. Lo que le da un toque más acaramelado y menos dulce, realzando el sabor de la manzana y las especies.
Me encanta la nuez moscada, pero nunca la había incluido en los dulces. A partir de ahora si la voy a utilizar porque le da un toque de sabor que me encanta.
Se toma con crema inglesa, pero yo solo le puse un poco de azúcar glas por encima. Se conserva perfectamente durante días. Se podía acompañar de una bola de helado de vainilla y tomar este dulce en templado.


Irish Apple Cake 
(Pastel de manzanas Irlandés)

Ingredientes:
375 gr de harina
175 gr de mantequilla fría
60 gr de leche
8 gr de levadura química
1 cucharadita de nuez moscada
1 cucharadita de clavo molido (Yo le puse canela)
175 gr de azúcar Blanco (yo puse moreno)
Un chorro de limón
375 gr de manzana pelada y troceada

Elaboración:
Pelamos y cortamos las manzanas en pequeños trozos, le ponemos parte del azúcar, un par de cucharadas y le añadimos el zumo del limón. Mezclamos y reservamos.
Tamizamos la harina junto con la levadura.
Cortamos la mantequilla en pequeños dados y se lo añadimos a la harina. Mezclamos con las manos hasta conseguir una mezcla granulada, como arena.
Batimos los huevos y le añadimos la leche. Mezclamos. Añadimos a la harina. Mezclamos con una espátula, solo hasta que se integre.
Le ponemos el resto del azúcar y las especies y mezclamos, queda una masa espesa, no os preocupéis es así.
Le añadimos las manzanas que teníamos reservadas a la masa y mezclamos.

Forramos un molde con papel de horno o engrasamos con mantequilla y enharinamos.

Y opte por poner papel de horno un poco húmedo, para que se adaptara a la forma del molde y darle un aspecto rustico e informal.
Ponemos nuestra masa en el molde y extendemos con una espátula, damos unos golpes contra la mesa para que la masa se asiente y salga el aire.

Llevamos al horno por 35 a 45 minutos, a mí me tardo 35 aunque en la receta original ponía 45 m, como sabéis cada horno es un mundo. Horno precalentado a 180 grados.
Sacamos del horno dejamos enfriar por unos 15 m, desmoldamos con cuidado, ya que es frágil y podría romperse.

Ponemos sobre una rejilla y dejamos que termine de enfriar.
Yo no lo saque del molde hasta que estuvo frio.

Le puse un poco de azúcar glas antes de servirlo.
En templado es delicioso, y si lo acompañamos con un poco de helado de vainilla,  puf…


Creo que... ya no os cuento nada más,  si os gustan las manzanas, mejor que lo probéis y me contéis.


 Nos vemos pronto, en la siguiente receta.
¡¡Besitos!!