miércoles, 19 de septiembre de 2018

Tarta de manzana Kazakhstan




Volvemos a nuestra rutina, vamos dejando atrás el verano. Y aquí empezamos de nuevo con nuestros viajes imaginarios y con nuestro reto Reposteras por Europa. 









¡Nuestro destino!!    Kazakhstán 



Para esta ocasión he preparado un pastel de manzana, que me recuerda a una tortilla de patata, tanto que pensé en cocinarla en sarten en vez de horno. Puede que pruebe a prepararlo haciendo alguna modificación en la receta.





Aunque he de deciros que he hecho algunos pequeños cambios, en la receta original. Cambio el azúcar blanco por azúcar moreno y le añado el zumo se una lima a la manzana troceada para evitar que se oxide.






En realidad, esta mezcla se asemeja mucho al relleno del strudel. O a si me lo parece a mí.

Aunque me quede también con ganas de preparar un pan que es muy común en las puestos callejeros. Es muy bonito, tiene que estar muy rico.




 Tarta de manzana (Kazakistan )

Ingredientes:

4 manzanas
180 gr de azúcar moreno
Zumo de lima
4 huevos L
120 gr de harina de trigo
Azúcar glas para decorar
Un par de cucharadas de azúcar moreno y unos trozos de mantequilla para poner por encima. antes de hornear (Opcional) 





Elaboración:

Pelar las manzanas, quitar la semilla y cortar en lonchas finas (como para hacer totilla de patatas)
Ponerle el azúcar y el zumo de limón.

Batir los huevos y añadir la harina.
Incorporar la mezcla a la manzana, mezclar.
Le  puse un par de cucharadas de azúcar y unos pedazos de mantequilla. 




Forrar un molde con papel vegetal, verter la mezcla. (Yo humedeci el papel para forralo y darle un aspecto mas rustico alos bordes.)

Horno caliente a 180º por 35 m






Se sirve en templado, con azúcar glas por encima. 











martes, 18 de septiembre de 2018

Pan rustico retorcido (Sin amasado)




 No hay mejor manera de relajarse que preparar una masa de pan.  Un alimento básico, y tan importante en la alimentación y a la vez tan sencillo. ¡¡Tan solo harina, agua, el fermento y sal!!

Si nunca os habéis atrevido con el pan, os animo aprobar. Aunque os digo que es adicto y que si empiezas cada vez te gustara más y más.
Y con esto no os estoy diciendo que no lo compréis hecho. Noo!!

Nada de eso, os invito a que conozcáis y améis el pan en sus variedades. No hay nada mejor que saber elegir y comprar un buen pan. Pan de verdad.
Yo valoro muchísimo a los panaderos que se levantan temprano para tener el pan listo a primera hora de la mañana. Creo que es un oficio de los más antiguos y bonito del mundo. En cada pieza artesanal, hay mucho trabajo y mucho cariño.

Porque el cariño y la dedicación es el mejor ingrediente.
Aunque si bien es cierto que la materia prima juega un papel de los más importante. 

Este pan le he preparado con harina de espelta de  Harinas la Encarnación   una empresa familiar que ha ido extendiéndose y mejorando con el paso de los años, con esfuerzo y sacrificios (Como se consiguen las cosas de verdad) El tesón y la lucha es lo que los ha hecho cruzar fronteras y hoy en día exportan sus productos fuera de España.
Os invito a que os paséis por su pagina.
La receta es de uno de mis libros de pan.






Pan rustico retorcido (Sin amasado)

Ingredientes:
500 gr de harina de espelta
325 gr de agua
6 gr de levadura fresca o 2 gr de seca.
10 gr de sal

Elaboración:
Ponemos en un bol la harina con el resto de los ingredientes.
Mezclamos con la mano, hasta conseguir una masa con todo bien integrado.
Dejar por unos 5 m. Después hacer pliegues desde el extremo al centro, cinco pliegues en total.
Dejar reposar por unos 15 m y volver a hacer los pliegues.
Tapar y dejar en la nevera, toda la noche.
Sacar de la nevera, si está muy frio dejar a temperatura ambiente por unos 30 m.
Extendemos la masa sobre la mesa enharinada, para que no se pegue y podamos manejarla.
Dejamos que se extienda, y después estiramos con cuidado, en forma de rectángulo. 
Cortamos en dos tiras, a lo largo.
Ponemos sobre papel de horno, estirando un poco y retorciendo por los extremos.
Dejamos que repose por al menos una hora. O hasta que la masa aumente de volumen.
Calentamos el horno a 250º con la bandeja dentro, para que este bien caliente.
En el fondo del horno ponemos otra bandeja metálica, en la que echaremos un vaso pequeño de agua al meter el pan, para que nos genere humedad.
Colocamos las barras sobre la bandeja del horno, echamos el agua. Dejamos por 10 m y después bajamos la temperatura a 200º por 30 m más. 
Si queremos una corteza gruesa, dejamos por 40 m apagamos el horno y dejamos 10 m más.